Wolfenstein: The Old Blood es la décima entrega de la saga Wolfenstein, creada para PC y la nueva generación de consolas: PlayStation 4 y Xbox One. Fue desarrollada por MachineGames y publicada bajo Bethesda Softworks. Se trata de la precuela de Wolfenstein: The New Order, utilizando nuevamente el motor id Tech 5, siendo lanzado el 5 de mayo de 2015 en formato digital y el 15 de mayo del mismo año en formato físico.
The Old Blood actúa como un pack de expansión independiente del tipo stand-alone, ya que no requiere de The New Order para jugarlo.
Argumento[]
Es marzo de 1946, la Segunda Guerra Mundial se ha extendido y la Alemania Nazi ha tomado la ventaja contra los aliados. Los últimos triunfos del tercer Reich fueron posibles debido a los nuevos inventos del General Calavera. Para poder iniciar un asalto masivo, el agente americano B.J. Blazkowicz y el Agente Uno han sido enviados por la OSA como infiltrados al Castillo Wolfenstein para robar una carpeta que contiene la ubicación del cuartel secreto de Calavera, la cual está bajo posesión de Helga Von Schabbs. Si lo logran, podrán darle una oportunidad a los aliados de cambiar el curso de la guerra.
Capítulos[]
La historia del juego avanza a través de 8 capítulos distribuidos en 2 partes más un prólogo.
¡Alerta de spoilers!
- Prólogo - Montañas Alemanas
Blazkowicz y Wesley se acercan al Castillo Wolfenstein en un auto por una carretera. Mientras pasan por el puesto de control, B.J. se encuentra con el segundo al mando de Helga, Rudi Jäger, y su tapadera casi es descubierta. Luego de entrar en la sala de comunicaciones del castillo y descubrir que la carpeta no estaba, contactaron a Kessler, un espía aliado que vivía en un pueblo cercano, para solicitar nuevas instrucciones. Desafortunadamente, el dúo es descubierto y B.J. se enfrenta a los guardias nazis mientras su compañero busca una salida rápida. Cuando finalmente encuentran una salida a través de una ventila, los agentes son capturados por Rudi y un Supersoldaten al final del ducto y noqueados por este último.
- Capítulo 1 - Prisión
Blazko y Wesley son llevados a fosas separadas en los calabozos, ubicados en lo profundo del castillo. Mientras el Agente Uno es llevado primero para ser interrogado, B.J. escapa de su celda con ayuda de una tubería rota, con la cual incapacita a los supersoldaten que vigilan el lugar. Avanzando por el bloque de prisioneros comunes vigilado por un Panzerhund y las jaulas de los Kampfhunde, consiguió armarse con lo que encontraba, hasta que llevó a un muelle donde vio a Rudi alejándose en un bote impulsado por un raíl junto a Wesley. Decidido a rescatar a su compañero, Blazko robó el último bote del lugar y navegó por el río interior del castillo hasta llegar a una caseta de control con un portón que impedía el paso.
- Capítulo 2 - Muelles
Tras abrir el canal, Blazkowicz se encontró con la entrada al torreón principal del castillo. Sin embargo, la compuerta estaba cerrada por 2 grandes tablones de hierro que debía retirar por separado desde sus respectivos puestos de control. La ruta del primer control está destruida por un derrumbe, pero la entrada sigue en pie y se puede llegar nadando. Al segundo puesto solo se puede llegar en otra barcaza de raíl siguiendo el río y, más adelante, por las catatumbas. Tras retirar los tablones de la entrada, Blazko entra en lo que sería el primer piso del torreón.
- Capítulo 3 - Torreón Wolfenstein
Luego de enfrentar a un supersoldaten en el vestíbulo, B.J. abrió las puertas que bloqueaban las escaleras, activando la alarma en el proceso. Con los guardias llegando desde los pisos más altos, Blazko se volvió a enfrentar a oleadas de nazis, incluyendo algunas unidades de élite, hasta llegar al último piso del sótano del castillo. Ahí encontró a Wesley atado a una silla eléctrica y herido. Habla con él brevemente y en la conversación su compañero le cuenta un truco para calmarse: cuenta hasta 4, inhala, cuenta hasta 4, exhala. Antes de alcanzar a liberarlo de sus ataduras, la silla es activada y la descarga deja inconsciente a B.J. y mata a Wesley. Al despertar, Blazko ve que está atado a la silla y Rudi está frente a él para interrogarlo mientras su kamphund albino, Greta, se alimenta del cadáver de Wesley. En un ataque de adrenalina, B.J. logra liberarse durante otra descarga y empuja a Rudi a la silla para electrocutarlo. Mientras el alemán sufre, Greta ataca, fallando y muriendo a manos de Blazkowicz. Tras enfrentar otra oleada de nazis, el americano le muestra respeto a su difundo compañero y se dispone a escapar de una vez por todas.
- Capítulo 4 - ¡Huida!
Con Wesley muerto y todo el castillo alertado de su fuga, Blazko se dirige al teleférico por donde entró a la edificación al principio para dirigirse al pueblo. Luego de abrir el portón, subió a uno de los vagones y comenzó el descenso al puente del control. Durante el tramo, la energía fue apagada desde una torre de soporte a mitad del viaje. Tras reactivarla, siguió avanzando hasta que, estando a punto de llegar al puente, el vagón se soltó a causa del constate fuego enemigo de los aviones Horten H IX, ametralladoras y drones. B.J. logró sobrevivir a la caída en el río exterior y se movilizó lo antes posible por una cueva cercana hasta llegar a un extremo del puente. El americano logró subir a la calle y abrirse paso a través de la barricadas, los soldados y un panzerhund.
Sin los nazis siguiéndolo, pudo llegar con calma al escondite de Kessler en una taberna. Ahí fue recibido por la ayudante del espía, Annette, una refugiada judía que Kessler había adoptado. Al reunirse con el tabernero, este le explicó que Helga se había llevado la carpeta al pueblo de Wulfburg para supervisar una excavación, antes de ser interrumpido por una emboscada de kamphunde que mordieron a Annette. Blazko se armó para defender el local. Tras el asalto, hubo un momento de calma que acabó cuando Rudi llegó en una armadura de combate experimental en busca de venganza por la muerte de Greta. El enfrentamiento terminó con la derrota de Rugi a manos de B.J, para poco después activar la autodestrucción de su traje. Blazko escapó a tiempo y se reencontró con Kessler para partir al pueblo. El nuevo plan sería ir a Wulfburg y reunirse con el Agente Dos para nuevas instrucciones.
- Capítulo 5 - Wulfburg
- Capítulo 6 - Ruinas
- Capítulo 7 - Casco antiguo
- Capítulo 8 - Excavación
Personajes[]
- William "B.J." Blazkowicz.
- Richard "Agente Uno" Wesley.
- Pippa "Agente Dos" Shepherd.
- Ludwig Kessler.
- Annette Krause.
- Katrin.
Antagonistas[]
- Helga von Schabbs.
- Emmerich Schreiner.
- Rudi Jäger.
Referencias a juegos previos[]
Wolfenstein: The Old Blood posee muchas referencias hacia algunos videojuegos anteriores de la saga, especialmente hacia Wolfenstein 3D y Return to Castle Wolfenstein.
- La historia en cierto sentido es similar a la de Return to Castle Wolfenstein, B.J. se infiltra en el castillo Wolfenstein con el agente Uno, ambos son detenidos y el agente Uno muere torturado mientras B.J. logra escapar y se abre paso a través del castillo, pasando por un pueblo hasta llegar a un sitio antiguo de excavación.
- El regreso de personajes de RtCW como el Agente Uno, Kessler, Helga von Bulow (quién es reemplazada por Helga von Schabbs).
- Minijuegos de "Pesadilla" que incluyen todas las misiones del capítulo 1 de Wolfenstein 3D de forma similar a la misión pesadilla de The New Order.
- Algunas zonas ya vistas en RtCW como lo es el castillo Wolfenstein y el pueblo de Paderborn aparecen nuevamente, pero en esta ocasión la localidad es reemplazado por el pueblo de Wulfburg.
Curiosidades[]
- Al comienzo del juego, mientras viajas en coche con el Agente Uno, si te fijas en la llave del coche el llavero de esta es el Lanzamisiles de Quake III.
- Durante el prólogo, es posible encontrar un casco especial el cual hace una posible referencia a The Elder Scrolls V: Skyrim, otro videojuego de Bethesda.
- En una de las habitaciones del castillo, se puede encontrar un muñeco peluche de un Cacodemon, un enemigo recurrente en la saga Doom.
- De acuerdo a un periódico que se puede encontrar durante el juego, se anuncia la operación del desembarco de Normandía como un fracaso para los Aliados, donde se detalla la muerte de unos 156.000 soldados aliados, la cual es la cantidad total de fuerzas aliadas durante el día D.